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El viajero de negocios no se detiene

El turismo de reuniones comienza a reactivarse. El factor determinante es la seguridad.

Por: Entrepreneur Staff Swipe

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La nueva normalidad ya está aquí y en la medida en que los semáforos para la reactivación económica cambian a amarillo y verde muchos sectores comienzan a regresar a sus actividades.

La mayoría de las cadenas hoteleras ya cuentan con programas de higiene y seguridad para evitar contagios por COVID-19 dentro de sus instalaciones, que se resumen en tener espacios no sólo limpios, sino también desinfectados.

Las tendencias apuntan a que la reactivación del turismo comenzará por lo local, viajes cortos y a destinos próximos que pueden alcanzarse por tierra.

Para sorpresa de la propia industria turística, la reactivación ha comenzado a través del turismo de reuniones, que en el México aporta el 1.5% del PIB y tiene un valor de 35,000 millones de dólares.


Grupo Brisas, una de las cadenas más emblemáticas de la historia del turismo mexicano, da cuenta de este fenómeno. “Escuchábamos a nivel internacional que nos íbamos a enfocar a nivel local o al carretero. Sí, a nivel individual así ha sido, y pensábamos que los grupos no iban a llegar, pero llegaron y estábamos preparados para recibirlos”, relata Ignacio Gómez, director comercial corporativo de la compañía.

Las Hadas by Brisas y Las Brisas Ixtapa fueron los complejos que reiniciaron operaciones principalmente con grupos, aunque no es la única apuesta de la compañía, que asegura estar abierto a todos lo segmentos y será muy flexible para recuperar a todos los turistas.

¿Cómo van a conseguirlo? Ignacio explica que la estrategia fue primero no dejar de trabajar ni perder la oportunidad de mantener el contacto con los clientes. “El equipo de ventas de grupos y de tour and travel estuvo muy cerca de los clientes, meeting planners, PCOs y la gente que está relacionada con los grupos de incentivo y estos grupos dan sorpresas”, comenta.


Generar confianza

Debido a la contingencia sanitaria, la industria turística se ha volcado a tratar de hacer que el cliente recupere la confianza en viajar. Pero más que eso, explica el directivo, la prioridad es hacer sentir al cliente contento y seguro.

“Hay que entender los cambios que nos están afectando a todos. Los hoteles de marca internacional siempre hemos manejado altos estándares de servicio y como tal estamos obligados a usar productos que nos permitan hacer la limpieza y sanitización adecuada en el área de alimentos y bebidas; blancos y cuartos”.

Fue así que, desde el emblemático hotele Brisas Acapulco, hasta el nuevo resort & SPA Nizuc, en Cancún, Quintana Roo, pasando por su línea para el viajero de negocios: Galería Plaza, Grupo Brisas puso en marcha todas las medidas pertinentes para recibir a los visitantes.


Nueva normalidad

El gran reto para los recintos feriales y hoteles no será poner en marcha las medidas sanitarias que dicta la ley, sino acostumbrarse al distanciamiento social obligatorio.

“Somos humanos y, en ese sentido, el ser efusivo es la parte importante de nuestra naturaleza. Mantener ese distanciamiento con nuestros clientes frecuentes es lo que más trabajo va a costar”.

Y es que en la compañía existen plazas que por temporada llegan a tener hasta el 80% de clientes recurrentes, como ocurre en Las Brisas Ixtapa o en la marca business Galería Plaza Reforma.


La tecnología como aliada

Una de las lecciones para el sector turismo en general es el aprovechamiento de la tecnología para el incremento de la productividad y lograr una comunicación fluida.

“En nuestro caso, la parte tecnológica se volvió fundamental y la productividad en el área de ventas se incrementó. La rentabilidad comienza a verse ahora que abrimos, pero la efectividad de la comunicación se mantuvo a través de las distintas plataformas”, comenta Ignacio.


Los viajes no terminan

Si bien la tecnología acortó distancias y resolvió muchas cuestiones de manera virtual, no será algo que merme en el sector y menos en el segmento de negocios, considera Ignacio.

En la época de los atentados a las Torres Gemelas en Nueva York en 2011 se hablaba mucho de que las video-conferencias le iban a quitar el negocio al turismo y no fue así.

El director afirma, “cuando tienes un negocio, tus cabezas tienen que ir a los destinos en los que se está desarrollando la negociación, donde se está elaborando un producto y manteniendo cada una de tus industrias. Vamos a continuar con la vida con muchas precauciones y cambios que serán positivos”.

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