Chablé Yucatán, paraíso para recién casados
Asombro y encanto: este hotel es un paraíso para lunamieleros internado en la naturaleza. Texto: Fernanda Orendain.
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Ubicado en el pueblo maya Chocholá, Yucatán, se encuentra el Hotel Chablé, antiguamente una hacienda henequenera. Realizamos un viaje para conocerlo y quedamos asombradas. La propiedad, creada por los mexicanos Jorge Borja y Paulina Morán, recibió el premio Prix Versailles 2017, que otorga la Unión Internacional de Arquitectos, por su diseño interior y exterior. Es un muy buen comienzo, ¿no creen?
Al llegar, nos recibieron con un vaso de barro lleno de balché (una bebida de la región de origen prehispánico usada entre los mayas para sus rituales) y así, refrescarnos. Luego, nos dirigimos hacia nuestra casita (la habitación). Cada una tiene una alberca privada, regadera al aire libre, múltiples amenidades, y lo mejor, ¡la propiedad es pet friendly!
El hotel ofrece cuatro tipos de estancia: las casitas, villas familiares, presidencial y royal. Cada una ofrece experiencias en contacto con la naturaleza y están decoradas con piezas de diseñadores y artesanos mexicanos.
La oferta culinaria que ofrece Chablé es asombrosa. Hay tres restaurantes en donde podrás degustar distintas propuestas.
Algunos de nuestros favoritos son: Ki´ol (que se encuentra a un costado de la alberca principal y ofrece platillos con productos del campo a la mesa, mismos que se cosechan en el hotel), Ixi’im, por los chefs Jorge Vallejo y Luis Ronzón ( donde los platillos tienen elementos de la cocina tradicional yucateca y son presentados de manera sofisticada), Casita Maya (con platillos 100% yucatecos preparados por cocineras de la región ) y el restaurante Wellness en donde encontrarás las opciones más saludables.
Para quienes buscan un día relajante, el hotel también cuenta con un SPA ubicado en el corazón de la propiedad. No olvides llegar una hora antes para disfrutar del circuito de hidroterapia antes de tu tratamiento.
La conexión con la madre naturaleza es la razón de ser de Chablé, y para lograrlo, el hotel ofrece múltiples actividades. Estas son algunas de ellas:
- Ceremonia de renacimiento maya
- Clases de Yoga
- Fitness bajo techo o al aire libre
- Paseo en bici
- Golf
- Temazcal
Y por si fuera poco, también puedes tener un recorrido por toda la propiedad en donde conocerás el santuario de la abeja melipona, apreciar venados en libertad, aprender de los Ka’anches, (huertos tradicionales mayas donde se siembra lo que se consume en los restaurantes de la propiedad), crear tu propio chocolate o tener una cata de mezcal y tequila. Además, si deseas conocer los alrededores, el hotel también puede gestionar tours privados por la zona.
Este hotel es un bellísimo refugio, de estilo refinado, que te trasladará a un estado de relajación total de la mano con la naturaleza. Ideal para lunamieleros o, simplemente, tomar una pausa antes de seguir con los agotadores planes de la boda.
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